5 de Octubre de 1988, una fecha Gatopardesca

5 de Octubre una fecha Gatopardesca.

El 5 de octubre 1988 es una fecha que para muchos de la generación de los 80 va estar siempre presente, cuantas historias personales, anécdotas y vivencias que con el paso de los años se han adornando entre realidades y fantasías juveniles, como no olvidar la franja del No la cual todos seguíamos con vivo interés, los mítines los días sábados, las protestas y peleas con los partidarios de la dictadura, también está el recuerdo de las reuniones hasta altas horas de la noche, de las discusiones si el tirano iba o no a reconocer el resultado, del miedo y la tensión de aquel día memorable.

Pero pasó el 5 de octubre, se ganó el plebiscito, el pueblo dijo un rotundo no al tirano y a su régimen de muerte y odio, vino la transición pactada, y se recuperó la democracia formal, se reestableció el parlamento y vinieron las elecciones democráticas.

Pero más allá de la emoción, ¿Qué significó el 5 de octubre?, fue el día en que los grupos fácticos los que están detrás de los contreras y pinochets y de sus hordas de asesinos, perpetraron y consolidaron su poder en el chile del segundo milenio.

Los mismos que idearon el golpe de estado de 1973, los mismos que consolidaron su poder económico manchado con la sangre de la dictadura, son los mismos que idearon el 5 de octubre, como una forma de que los militares volvieran a sus cuarteles, porque ya habían hecho su trabajo, habían generado un sistema económico a su medida elevándose a rango constitucional el derecho a la propiedad, vendiendo (regalando) a precios irrisorios las empresas del Estado, entregando al control de las empresas básicas como son la telefonía, el agua y otras de importancia estratégica, desmantelando las conquistas sociales alcanzadas durante gran parte del siglo XX, haciendo una legislación laboral a la medida de los empresarios y precarizando la condición social de miles de trabajadores.

Ese grupo que controla política y económicamente el país, fue el que negoció la transición, fueron los que repitiendo la frase de la celebre novela de Lampedusa, El Gatopardo, “hay que cambiar para que las cosas sigan igual”, se cambiaron los administradores, pero manteniendo la carta de ruta, y si bien en estos 18 años desde el 5 de octubre de 1988, se ha avanzado en materias de libertades políticas, pero manteniéndose el sistema binominal que deja fuera del sistema a importantes sectores sociales, no ha tocado las bases económicas y del sistema social que se creó al amparo de los militares, con la democracia a la casta que maneja el poder, se le abrió el mundo para hacer sus negocios con los recursos naturales de todos los chilenos, los políticos de la concertación se transformaron en sus mejores agentes comerciales y ellos pueden decir, que Chile es un país democrático y en orden.

Como dije y reitero, nunca pierden, Chile es su coto de caza, donde siempre cuentan con importantes aliados ayer fueron los militares y la derecha, hoy son los políticos de la concertación.